
La luz del Mediterráneo en Collioure tiene algo especial, ¿no creen? ☀️ Es un lugar que invita a pasear sin prisa, a perderse por sus callejones llenos de arte y color. Pero tan importante como explorar es saber cuándo hacer una pausa.
Capturé este momento cerca de la playa, donde esta familia aprovechaba un merecido descanso. Sentados en un pequeño muro, bajo la sombra de las sombrillas de un café bullicioso, encontraron su instante de calma. 😌 Para mí, esta es la pura esencia de la fotografía callejera y de viajes: esas pequeñas historias humanas que se desarrollan espontáneamente.
Como fotógrafo, me encanta encontrar estos contrastes: la quietud de los protagonistas frente a la energía de la terraza que tienen a sus espaldas. Un simple muro se convierte, de repente, en un palco de primera fila para ver la vida pasar. Es en estos momentos de «no hacer nada» donde a menudo se siente más profundamente el espíritu de un lugar. 📸✈️
Y tú, ¿cuál es tu forma favorita de ‘recargar pilas’ cuando estás explorando un lugar nuevo? ¿Eres de parar en un café o de buscar un banco con vistas? ¡Te leo en comentarios! 👇